En fechas como Navidad, Día de Reyes o Día del Amor y la Amistad, es muy común obsequiar una mascota, pero debemos estar conscientes de sus necesidades, ya que no solo requieren de agua y comida, sino de muchos cuidados más para evitar que terminen abandonadas.
Al elegir una mascota como regalo, no se trata de un obsequio cualquiera, sino de un nuevo miembro de la familia que dejará un recuerdo inolvidable. La decisión de regalar un perrito, gatito, tortuga, conejo, aves, peces o algún otro animalito debe ser considerada con responsabilidad, compromiso y conocimiento acerca de sus cuidados.
Tener una mascota es algo que puede ser beneficioso para los niños en el desarrollo de su sentido de responsabilidad y es posible hacerlos que participen en los cuidados de la nueva mascota, pero en realidad será un compromiso compartido con los padres de familia.
De inicio se debe considerar tener previstos un plato para agua y otro para comida, una cama cómoda, un collar y su placa de identificación, cepillo y juguetes que serán necesarios en la etapa de cachorros.
Con relación a la alimentación del nuevo integrante de la familia es aconsejable elegir un alimento balanceado que equilibre los nutrientes que requiere tanto en etapa de cachorro como de adulto, según sea el caso. Además de la alimentación, la higiene de la nueva mascota es muy importante, especialmente si la interacción con niños es cercana, dicho aspecto básicamente consiste en baños regulares y un cepillado frecuente.
Otro aspecto a tener en cuenta es la educación, la cual debe establecerse desde su llegada al nuevo hogar. Es básico enseñarles a nuestros animales de compañía normas básicas de convivencia y corregir comportamientos indeseables, cuando se presenten. También es aconsejable elegir nombres cortos que les sean más sencillos de aprender.
Mantener la salud de la nueva mascota es fundamental para un buen desarrollo y convivencia con los demás miembros de la familia; para ello, es importante que sea revisado regularmente por un médico veterinario, quien recomendará los cuidados preventivos necesarios, tales como, vacunas y desparasitaciones.
El juego y el ejercicio también tienen un papel relevante en la convivencia con nuestros nuevos animales de compañía, porque esto les permitirá socializar y mantenerse sanos.
Al plantearse la idea de regalar una mascota se debe considerar también la posibilidad de que sea adoptada, ya que justamente muchos animales terminan abandonados en refugios después de haber sido regalados, esto debido a que una vez que pasa la emoción de la novedad, los niños y familias van perdiendo el interés por el nuevo miembro y se dan cuenta de la responsabilidad que implica sus cuidados tanto en tiempo, como en economía.
Por todo lo anterior, la decisión de incorporar un perro o un gato a nuestra vida, debe ser meditada y consensuada por todos los miembros de la familia, ya que, una mascota es un ser vivo, que va a requerir de atención y cuidados por un largo tiempo.
