1. La proteína debe ser el principal nutrimento que integre la cena. Ésta se puede obtener de las carnes (cerdo, res, pollo, pescados) y/o sus derivados (huevo, queso, yogurt).
2. La mejor bebida para acompañar es el agua natural o alguna infusión sin azúcar.
3. Consumir cantidades pequeñas de grasas y de preferencia que éstas sean de origen vegetal, como el aguacate, aceite de canola, cártamo y semilla de uva para cocción, y el aceite de olivo de preferencia en preparaciones crudas.
4. Evitar y, de ser posible, eliminar los cereales refinados y azucares simples. Si se desea integrar un cereal, es preferible que sea integral y bajo en grasa, como 1 o 2 tostadas de maíz horneadas o ¼ tza arroz integral cocido.
5. La guarnición, por excelencia, para completar la cena, son las verduras, las cuales se pueden consumir cocidas o frescas.
6. En la cena, también se puede tomar un postre, el cual puede ser una taza de fruta baja en azúcar (guayaba, fresa, melón, manzana, papaya, kiwi, durazno, etc.).