El ciclismo ha adquirido más relevancia en los últimos años, con la llegada de la pandemia, las ventas de bicicletas para evitar el transporte público incrementaron bastante. Este medio de transporte ofrece muchas ventajas tanto para su uso cotidiano, como de forma recreativa, algunas de ellas son:
- Mejora la salud cardiovascular: al ser un ejercicio que acelera el corazón, conocido coloquialmente como “cardio”, mejora la circulación y reduce el riesgo de enfermedad cardiaca.
- Ayuda a prevenir la obesidad: la quema de calorías ayudará a tener una mejor salud metabólica.
- Fortalece los pulmones: los pulmones trabajan en conjunto con el corazón, por lo que ambos se benefician.
- Tonifica y fortalece los músculos: principalmente las piernas, glúteos y el tronco, se ven beneficiados con este ejercicio.
- Aumenta la elasticidad muscular y articular: la movilidad se ve beneficiada, sin embargo, es importante tener bien ajustada la bicicleta, para no lesionarnos, especialmente con la altura del asiento.
- Reduce el estrés: toda la actividad física tiene este beneficio, sin embargo, el ciclismo en particular permite conocer los rumbos de distinta forma y si se hace en equipo, puede ser aún más agradable.
- Mejora el rendimiento cognitivo: incrementa la atención y la reactividad, gracias a que tenemos que mantenernos pendientes del camino y nuestro entorno, nos encontramos más estimulados, por ende, también se beneficia la concentración.
- Favorece la salud mental: dichos beneficios influyen de manera positiva en la autoimagen y autoestima de quienes lo practican, por lo que las relaciones personales y el bienestar emocional, mejoran.
Además de esto, la bicicleta ayuda a reducir la quema de combustibles al ser un medio de transporte ecológico, inclusive en algunos lugares es la mejor opción de movilidad.
Recuerda siempre seguir las instrucciones de seguridad, como el ajuste de tu bicicleta, darle mantenimiento, aprender las técnicas y llevar el equipo adecuado. ¡Disfruta y rueda sin lesionarte!